jueves, 19 de febrero de 2009

¡AMANECE!

Que amanecer de seda!

El sol
suave
no se atreve
a salir del todo

Y el aire
vibra
como si un coro
de grillos tañese sus campanas

Un zumbido de libélulas
somnolientas
me recorre la médula
desde la nuca

Siento un escalofrío

¡Y el rojo
vence al violeta!

1 comentarios:

E. Martí dijo...

El rojo vence a la noche...Llega el amanecer de fuego, se nos ofrece un abanico de sorpresas...
Abre la cortina y vive!!!

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